POEMA SOLIDARIO
Que la guerra esté lejos.
Habrá guerra, siempre hay guerra, pero
que esté lejos,
que le pase a otra gente, pobre gente
que no conocemos.
Que las desgracias tuerzan la esquina
sin fijarse en mí.
Que bajen por otras calles,
que se lancen sobre otros, pobres gentes
que no conocemos.
Siempre habrá desgracias
pero que lleguen tarde,
o mejor, que se pierdan por el camino.
No puedo hacer nada.
Un donativo, gritar en la calle, pintar
una pared, llevar
una pancarta…
Nada.
Una gota de agua
en un lago seco.
Nada de nada.
Maldigo al hombre.
Lo maldigo mil veces.
Soy hombre, me maldigo cada día
y no puedo hacer nada,
Unas palabras, un abrazo, nada para devolver
los golpes de la vida.
¿Devolver los golpes?
Si ni siquiera puedo verlos venir…
Rezo. Cada día rezo
para que la guerra esté lejos,
para que su humo avance en otra dirección.
Para que las desgracias talen otros árboles
aunque ya casi no quedan árboles
y mi casa está demasiado expuesta,
una casa solitaria, sin árboles
que la escondan.
HORÓSCOPO
Los que piden la paz
morirán.
Los que piden la guerra
morirán.
Los que odian hasta su sombra
morirán.
Los que no saben odiar
(aunque lo intenten)
morirán.
Los que creen en las palabras
morirán.
Los que creen que la tierra es santa
y hay que regarla con sangre
morirán.
Los que creen que ninguna tierra es santa
y que la sangre no debe ser derramada
morirán.
Los que se drogan con discursos,
se emborrachan de banderas,
se duermen entre balas y puñales
morirán.
Morirán en sus camas, morirán
en las calles, salvajemente
cruelmente.
Antes de que acabe el día, antes de que llegue
otra noche sin luz
morirán.
Los felices, los infelices, los afortunados, los tristes
y los contentos,
los satisfechos y los tranquilos
morirán,
morirán por cualquier cosa,
morirán por nada,
morirán.
https://campobasepoesia.blogspot.com/